"Not a problem Raquel, will sort it today and send you your invoice Monday morning."
No sé si es el Inglés de Inglaterra o si la incertidumbre me tiene mal, pero no tengo idea que quiere decir ese último correo de Londres.
¿Quiere decir que ya está reservado mi puesto en la Gira del 27 de julio? ¿O será que todavía no puedo descruzar los dedos? Considerando los antecedentes, no voy a estar tranquila hasta el lunes. (Se aceptan interpretaciones al respecto. Gracias).
Ese fue el primer correo que recibí ayer (viernes) en la mañana. El segundo, fue de los corredores de seguro indicándome el link para llenar un formulario. Por supuesto que ese formulario tiene más páginas de las que quisiera llenar y requiere revelar cosas totalmente irrelevantes al accidente. Pero conmigo no va a funcionar su estrategia: ahorita que tengo las dos manos atadas (casi literalmente), tengo tiempo de sobra para llenar papeles.
Y finalmente un tercer correo. Por si mi viaje no había tenido suficientes complicaciones o por si mi blog se estaba poniendo aburrido, mi amiga con la que me iba a quedar en Europa unos días después de la Gira, resulta que ya no va a estar allí! Por causas migratorias y en contra de sus preferencias, se tendrá que regresar a El Salvador.
De acuerdo, eso no es un obstáculo para mi gira en bicicleta de Londres a Paris. Pero me roba de una buena y emocionante parte de mi viaje (me hubiera encantado pasar esos días con mi amiga) y me complica la planeación.
Aun dándole vueltas a este nuevo factor que considerar en mi travesía, puse el Giro d'Italia en la tele y empecé mi entreno. La etapa estuvo buenísima. Los últimos kilómetros, en los que los ciclistas subían tanto que por ratos se perdía la transmisión, incluyeron un emocionantísimo duelo entre el español Alberto Contador y el venezolano José Rujano. Y la etapa cerró con Contador portándose como todo un caballero, reconociéndole el esfuerzo cediéndole el gane a Rujano, comportamiento que solo se ve en el ciclismo. (Para los más interesados en el deporte, Steephill es un buena página para mantenerse enterado).
Ver el Giro me animó bastante.
Pero ahora, hablé con mi amigo, el que tuvo cancer y por quien me inspiré a aceptar el reto para recaudar fondos. Me confirmó que los resultados de su chequeo médico esta semana habían salido negativos. Una vez más, los doctores le aseguraron que estaba saludable, que los tratamientos curativos habían sido efectivos y que los preventivos lo estaban siendo.
Eso, me dio muchísimo ánimo más. He tenido suficientes trabas y complicaciones mientras me preparo para la Gira. Pero voy a hacerlo. Voy a pedalear de Londres a Paris. Y lo voy a hacer porque quiero apoyar la investigación para la mejora el tratamiento del cancer. Quiero hacer mi parte.
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